Este personaje es gracioso y patético al mismo tiempo, se trata de la señora que al subirse al ómnibus y encontrarse sin asiento, empieza a atacar verbalmente a algún joven con la intención de que este le ceda el asiento.
Lo curioso de este asunto no es que pretendan el asiento (es razonable que cualquier persona que no se pueda mantener parada por mas de 5 minutos desee estar sentada). Lo que si me parece curioso es la forma en que estos depredadores atacan: primero se posicionan cerca de la persona aparentemente mas saludable que esté sentada, y después empiezan a vociferar cosas tales como “Ay los jóvenes de hoy viven tan cansados!” o “Ay tengo un dolor de columna..”, no importa que vayan solas igual lo tiran al aire.
Por supuesto que para poder convencer a la joven víctima de que le debe ceder el asiento o arderá en el infierno, las viejas tiraindirectas deben mostrar un estado lo menos saludable posible. Para lograr este objetivo muchas viejas tiraindirectas llevan durante sus años mozos, una vida de excesos y autoflagelos y así pueden llegar a la adultez bien demacradas.
La pregunta que muchos jóvenes se hacen es ¿cómo reaccionar ante estos ataques? las opciones mas comunes son ceder el asiento o seguir sentado indiferentemente, pero son las mas aburridas. Lo mejor que se puede hacer es pagar con la misma moneda y responder las vociferaciones con vociferaciones, tales como “las viejas de hoy en día vienen cada vez mas hechas mierda” o “mierda! cargo con la cruz de ser joven en esta sociedad de viejas tiraindirectas”. Estas respuestas son independientes de la decisión a tomar sobre el asiento, o sea se pueden hacer y seguir sentado, o mientras uno se va parando con resignación.
Un caso más extremo fue el de un amigo (cuyo apodo no revelaré pero su nombre es Gonza), que cansado de que lo atacaran un día respondió diciendo: “si estoy cansado porque vengo de cogerme a tu nieta, y si querés sentarte vení que pa vos también hay acá (esto último mientras se tocaba las partes)”, la última parte fue en serio porque a Gonza le gustan las veteranas…
Esta reacción no es la mas recomendable, el error que cometió Gonza fue el de referirse directamente a la vieja en lugar de tirar una indirecta. Yo recomiendo entonces ante la pregunta antes planteada, contestar cualquier barrabasada a estos seres pero siempre usando su propia arma: las indirectas.
6 comentarios:
Jajaja me cage de risa. Como personaje indeseable del omnibus tengo a las madres que te hacen pasar por menor de 5 para no pagar un puto boleto. Yo me acuerdo de tener como 9 años era mas alto que el guarda y la hija de puta de mi vieja estuvo 15 min chamullandolo pa no pagar boleto, al final no fue que el guarda me dejo pasar, fue que estuvo tanto rato chamullandolo que para cuando termino de hablar mi vieja ya nos teniamos que bajar. De esos momentos que te hacen ser la persona de mierda que soy hoy en día. EL PABLO
los domingos en los omnibus las viejas son lo peor. Habría que poner un omnibus para viejas y que les cobren el boleto mugroso ese de cuatro pesos. Si quieren viajar en losomnibus comunes que paguen 13,50 y se la banquen si les toca estar paradas
salute
Muy buen post... ayer sufrí la presencia de otro sujeto indeseable: el guarda de bondi "un pasito más por favor". El tipo no se daba cuenta que el bondi de la mitad hacia atrás estaba hasta las pelotas, y donde él estaba sentado iba re cómoda la people. Salu2
pah las viejas tiran las mejores indirectas, y si no funciona te meten el peso de una. Una vez vi un tipo que se sentó y en ese momento viene una vieja con la hija (una cuarentona) que le dice: "no vas a dejar sentar a mi madre que está muy cansada?" y ta, el tipo le dio el asiento porque se dio cuenta que la próxima venía con spray de pimienta a la face.
Otra cosa que me encanta de las viejas es que están retorciéndose pero cuando se libera un asiento usan toda la fuerza que ahorraron en los últimos 5 días y se pegan una corrida que ni en el entrenamiento de Rocky Balboa (estando viejo)
la gente pide un nuevo post!
Hace un artículo sobre lso amigos que te tiran bromas y cuando te las creés te palmea la espalda
Publicar un comentario